viernes, 15 de mayo de 2015

NI NAZIS NI AMIGOS DE NAZIS

COMUNICADO CANCELANDO EL CONCIERTO PARA EL FAN HEMENDIK EGUNA EN OÑATI.

El 13 de Junio tenía previsto dar un concierto para el Fan Hemendik Eguna en Oñati (Euskal Herria), pero lo cancelo por haber incluído la organización en el cartel a un grupo que hace versiones de Des-Kontrol, un grupo que ha sido denunciado por multitud de antifascistas por su ambigüedad con los nazis. No conocía al grupo, pero unos compañeros de Euskal Herria me han avisado de qué clase de personajes son. Me han pasado información, he buscado yo más y he llegado a la conclusión de que no son “rumores infundados” como dicen sus defensores, sino que hay muchísimas pruebas de sus amistades nazis. Que este grupo, una vez denunciados, empezara con el postureo “antifascista”, no cambia nada. Pues a las personas se las juzga por sus hechos, no por lo que dicen que son. Por esa regla de tres, el PSOE sería un partido socialista porque dice que lo es.

Que dediquen X canción al “antifascismo” pero luego se comporten como ambiguos, tiene aún más delito. Pues a quien va de antifascista, lo mínimo que se le puede exigir es que no sea tolerante con el fascismo. La organización tira de amiguismo para no expulsarlos del cartel (la condición que yo ponía para dar el concierto por una causa que creo justa) y a la vez, de ambigüedad dando los “argumentos” huecos de sus defensores. La organización dice que: “Desde Fan Hemendik creemos que Des-Kontrol es un grupo que comparte nuestra ideología”. En este momento no hay más que hablar, si la organización comparte ideología con quienes han salido con camisetas de grupos nazis y han sido colegas de varios (volvemos a lo mismo: hay multitud de pruebas), hay un serio problema. Hacer una jornada contra los fascistas de la Guardia Civil y luego dar cobijo a quienes tocan temas de amigos de nazis, es una contradicción insostenible. Que en Euskal Herria, con todo lo que el fascismo ha hecho sufrir al pueblo, haya quienes tengan actitudes ambiguas con amigos de nazis diciéndose antifascistas, es preocupante.

Que otro de los “argumentos” sea que este grupo ha tocado alguna vez para los presos vascos, es como decir que un nazi puede ser bueno si trata bien a su mujer. Me parece irrisorio tener que discutir algo así a estas alturas y más con “antifascistas”. El problema es de quienes llamaron a amigos de nazis para tocar por los presos que han dado su vida contra el fascismo, en todo caso, pero desde luego eso no exime de culpa a Des-kontrol. Así respondía Des-kontrol a la Asamblea antifascista de Bilbo cuando los atacaron por sus amistades y camisetas de grupos nazis: “No se pueden valorar las creencias políticas de una persona por una camiseta y menos si es de un grupo de música”. ¿En serio hay que responder a esto? A quien le parezca justificable que alguien que se dice antifascista lleve una camiseta de un grupo nazi, que se lo haga mirar. Pero a mi me produce el más profundo asco y no compartiré carcel con quien toca sus canciones extremadamente falsas y nada consecuentes.

Volverán con la misma cantinela: “es que tienen canciones antifascistas”, es que “han tocado para los presos”. Y qué decir de quienes los defienden diciendo “no son nazis”. Pues precisamente ahí radica el grave asunto, que si fueran nazis no se les podría exigir que se comporten como antifascistas porque no van de eso, pero a alguien que se dice antifascista y tolera a fascistas, por supuesto que se le debe repudiar. Me revienta tener que discutir esto tan evidente a estas alturas, como me revienta que por amiguismo y ambigüedad se defienda lo injustificable, pero sobre todo porque la causa que se reivindica ese día, es justa y no podré estar allí porque no pienso compartir cartel con quien toque las canciones de Des-kontrol.

Fuera las fuerzas de ocupación de Euskal Herria, pero también fuera los amigos de nazis que dicen ser antifascistas y que se han montado un negocio a base del postureo y de manchar unas ideas tan, tan serias, por las que muchxs han dado la vida y de lxs que el pueblo vasco sabe bien.


Pablo Hasel